Noche ambigua para el Real Madrid: silbidos pese a golear al Celta
El regreso de Real Madrid al estadio Santiago Bernabéu después de casi un mes sin jugar en casa fue lejos de ser un sueño en una noche de Copa del Rey. Más bien, parecía ser una jornada crítica para los merengues frente a decenas de miles de espectadores en este partido de octavos de final contra el Celta.
Todo comenzó a favor de Madrid, con goles de Mbappé y Vinícius. Parecía que el Merengue podría rápidamente pasar página tras el 2-5 sufrido ante Barcelona en la final de la Supercopa de España disputada en tierras saudíes. Sin embargo, los jugadores Aurélien Tchouaméni, Lucas Vázquez y hasta el entrenador Carlo Ancelotti fueron silbados, aunque también recibieron tímidos aplausos.
El giro inesperado del partido
Pero el Real Madrid se distrajo hacia el final del partido y, en los minutos 83 y 90, Bamba y Alonso anotaron los goles que llevaron el partido a la prórroga, ante la mirada atónita de la enfadada afición en el Bernabéu.
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La entrada de Endrick fue clave para el equipo: anotó dos espectaculares goles, el tercero y el quinto, para salvar al Madrid de una nueva decepción, la misma que tuvo en la anterior edición de la Copa del Rey, cuando también cayó en octavos ante el Atlético de Madrid. Fede Valverde también contribuyó con un golazo desde fuera del área.
El presente del Real Madrid
Este paso casi en falso se suma a su flojo presente en la Champions League. En dicho certamen, los fanáticos ya habían mostrado su descontento con la plantilla en la derrota 1-3 en casa ante el Milan en noviembre. Actualmente, Real Madrid se ubica en el puesto 20 de 36 equipos, sin lograr la clasificación directa a octavos de final a falta de dos jornadas.
La pregunta que queda en el aire es: ¿Lograrán enderezar el barco?
